JUANJO Y EL PRODUCTOR IMPASIBLE: DUODÉCIMA ENTREGA

Juanjo: ¡Soy yo otra vez, señor Productor Imposible! Le traigo un proyecto que le dará dinero suficiente para comprar otros dos hangares repletos de niños taiwaneses.

Juanjo: Los mediocres hacen películas badadas en videojuegos... ¡Yo hago películas basadas en el entorno Microsoft Windows!

Juanjo: Nuestro protagonista es... el clip del Word. Ése que aparece para ayudarte cuando menos le necesitas...

Juanjo: Pues bueno, el clip del Word está paseando por ahí, de una subcarpeta a otra, y por el paseo de la barra de menú... y entonces ve a unos tipos escribiendo una carta. Lógicamente, él va hacia ellos y les dice: “Parece que están ustedes escribiendo una carta. ¿Desean que les ayude?”

Juanjo: Ellos aceptan la ayuda. Así que el clip empieza a corregirles, y sugerirles... y mientras lo hace, poco a poco, ¡se da cuenta de que está ayudándoles a escribir una carta de secuestro!

Juanjo: ¡Ya sabe! La típica carta de “Hemos secuestrado a fulanito, exigimos un rescate de tantos millones, etc, etc, etc”. ¡Y leyendo y corrigiendo la carta, el clip descubre que a quien tienen secuestrado es a su amigo el perrito! ¡Ese perrito que también aparece en el word para ofrecerte su ayuda!

Juanjo: La situación es muy jodida para el clip. Porque tienen secuestrado a su mejor amigo y compañero. Y porque al meterse a ayudarles con la carta, ¡se ha convertido en cómplice sin él saberlo! Era un plan milimétricamente calculado por los secuestradores: Implicar al clip para cargarle el muerto, y que el clip sirviese de señuelo para despistar a los policías-norton.

Juanjo: Y la trama de la peli consistiría en eso. El clip del Word huyendo de la poli y de los terroristas, para que no lo atrapen y lo encierren en una celda de Excel. Buscando pistas de carpeta en carpeta. Saltando de icono en icono, para evitar caer a la papelera de reciclaje, en el fondo del abismo del escritorio...

Juanjo: Al final, el clip estaría suspendido en el vacío, colgando de un solo brazo, a duras penas de la barra inferior de menús del windows, a punto de caer al fondo (de escritorio) y acabar triturado en la papelera de reciclaje. El jefe de los secuestradores, desde un icono flotante cercano, apuntaría con su pistola a la mano con la que se mantiene agarrado el clip y, antes de disparar, le diría: “Bueno, clip. Esto es el fin”. Y el clip contestaría: “¡No, capullo! ¡Es el INICIO!” ¡Y el clip, con su mano libre, daría un puñetazo al botón de INICIO, que está junto a él! ¡¡El menú desplegable que se abre cuando se aprieta ese botón... se... desplegaría, golpeando al terrorista, empujándolo fuera del icono flotante, y arrojándolo a la papelera!

Juanjo: ¡Y tengo el título perfecto para este thriller de acción! Se titularía...

¡¡ CLIP-HANGER !!

Juanjo: Si es que ya tengo pensada hasta la frasecilla de tag-line: “Siempre llega en el momento inoportuno”.

Juanjo: Quiero que al clip lo doble Ramón Langa.

Juanjo: Bueno, ¿qué le parece?

Juanjo: Podemos vender cajitas de clips, así... en plan merchandising... En Metrópolis y en Elektra se venderían como churros... Y en Madrid Cómics, y en Atlántica, y...

Juanjo: Y luego podemos hacer una precuela de época, ambientada en el Windows 3.1 ...

Juanjo: Eh... Esto... Bueno... Le dejo aquí mi currículum y el dossier del proyecto... Mi número de teléfono está en los dos sitios... Llámeme cuando quiera... Seguro que podemos llegar a... algún tipo de acuerdo... ¡Ha sido un placer!